Crítica: Loki, segunda temporada, una nueva entrega que no cumple con las expectativas

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Loki

A estas alturas del partido no es ningún secreto el hecho de que el Universo Marvel lleva ya bastante tiempo de capa caída sin ningún proyecto fuerte y contundente a como nos tenían acostumbrados. Y la mejor prueba de ello es la segunda temporada de Loki.

Y por supuesto, al no verse a largo (o a corto) plazo hasta dónde puedan llegar y sin contar ya con una historia potente o interesante que atrape la atención de ese espectador tan cambiante que (paradójicamente) fue criado viendo el nacimiento de este universo.

Paradojas aparte, nos gusta pensar que las cosas llegarán a buen puerto, pero no creemos que esto llegue a ser posible.

Aquellos que esperan una nueva temporada multiversalmente maníaca de Loki deberían moderar sus expectativas. La ausencia de la directora Kate Herron aparentemente ha eliminado el astuto sentido de la serie de que todo vale, convirtiendo efectivamente a la temporada 2 (y, sorprendentemente, al propio Loki) en un engranaje obediente y poco interesante en la megaestructura cada vez más difícil de manejar del MCU.

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¿De qué trata esta segunda temporada de Loki?

Junto con Mobius, Hunter B-15 y un equipo de personajes nuevos y recurrentes, Loki navega por un multiverso cada vez más peligroso y en constante expansión en busca de Sylvie, el juez Renslayer, Miss Minutes y la verdad de lo que significa poseer libre albedrío y gloria.

Con un elenco que incluye a Tom Hiddleston, Owen Wilson, Tara Strong, Eugene Cordero, Sophia Di Martino, Liz Carr, Rafael Casal, Kate Dickie, Ke Huy Quan, Wunmi Mosaku

A riesgo de condenar con débiles elogios, es realmente reconfortante ver una serie de Marvel que en realidad trata sobre algo real y significativo, al menos más que la pregunta estándar de si se pueden girar suficientes engranajes narrativos para establecer vagamente una historia o una posible dirección para alguna película o programa futuro que tome las cosas a continuación.

Los seis episodios que conforman esta segunda temporada (aunque solo se han estrenado tres, ya que la serie terminará de transmitirse hasta el 9 de noviembre) tienen solo un poco de la rareza esotérica que con tanta frecuencia hizo que la primera temporada fuera una maravilla. La trama es tan complicada que rara vez se desprende la sensación de diversión, pero gracias al excelente elenco y a algunos de los mejores diseños de producción de la televisión, casi siempre hay algo que capta tu atención, si no que desencadena una inversión emocional.

Esta serie la puedes ver en Disney+

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