Crítica: Ven a jugar, el terror invade Netflix
Ven a jugar (Come Play) es otra película que acaba de aterrizar en Netflix luego de haber estado disponible en otras plataformas de streaming, en este caso, en Amazon Prime. A pocos días de su estreno ya se coló en el top 10 de las películas más vistas de la plataforma, aunque, como ha sucedido previamente, no es una producción nueva.
Escrita y dirigida por Jacob Chase (Girl in the Woods), Ven a jugar gira en torno a Oliver, un niño autista y solitario que un día se topa con un espeluznante cuento infantil en su smartphone titulado “Monstruos incomprendidos”, cuyo protagonista es nada menos que Larry, un ente diabólico.
En su condición de niño con capacidades diferentes, el pequeño desconoce que, al leer el relato de Larry, un larguirucho y desesperado monstruo, está invitándole a irrumpir en su vida.
Sin embargo, el verdadero objetivo de Larry es algo mucho más siniestro. A esta ecuación se suman otros factores: un matrimonio de jóvenes padres que no están pasando por su mejor momento y un grupo de compañeros de escuela que trolean con gusto al pequeño Oliver quien, por cierto, no se puede comunicar por medio de la voz, solo a través de una aplicación que, mediante el smartphone o la tablet, emite con una robótica voz todo lo que el niño escribe.
¿Quién es el monstruo Larry?
Lo malo en este caso es que este monstruo se materializa a través de los mencionados objetos electrónicos.
Así como sucede con otras películas de este estilo, como “No apagues la luz” en Ven a jugar, la tecnología juega un papel muy importante, dado que Larry solo se hace visible mediante los objetos electrónicos o bien consumiendo la luz de cualquier fuente, casera o de la calle. La premisa es, por lo tanto, muy escalofriante.
Adicionalmente, el director también se vale del mundo infantil de formas tan variadas como inteligentes. Sin embargo, la película Ven a jugar también deja claro que muchas veces son los adultos quienes complican la vida de los niños. En esta cinta, como en muchas otras que hemos visto, son los adultos quienes no creen – hasta que lo viven en carne propia – lo que está sufriendo Oliver.
Claro que no faltan los clásicos clichés que no por ser muy usados dejan de ser emocionantes. Ya saben, luces que se apagan, un cuento aterrador e incluso el hecho de que Larry puede estar a treinta centímetros de ti, sin que puedas verlo, a menos que lo hagas a través de la cámara de un dispositivo.
Tampoco debemos dejar de lado la apariencia del monstruo, aterradora, pero con claros indicios de CGI que a veces se ven demasiado falsos. Eso sí, el final es de lo mejor. Ofrece un twist diferente a lo que normalmente estamos acostumbrados, es decir, aquellos predecibles finales donde el malo es vencido y los inocentes viven happily ever after.
Come play cuenta con buenas interpretaciones a través de su cast compuesto por: Gillian Jacobs (La calle del terror Parte 1: 1994), John Gallagher Jr. (Underwater), Azhy Robertson (Invasión), Winslow Fegley (Cuentos al caer la noche) y Rachel Wilson (En la hierba alta), entre otros.
En resumen, Ven a jugar es una buena película de terror que te hará saltar un par de veces en el sofá, así que no pierdas más tiempo y corre a verla a Netflix.
Emprendedor, empresario, fan del buen café y de las playas del Caribe Mexicano. Creador y Director Editorial de las revistas Vochomania, Tuning Car, Curvas, Mundo Volkswagen y muchas más. Editor en Autoproyecto. CEO de MB Digital Entertainment. #DogLover #AdoptaNoCompres
