¿Cómo se determina qué clasificación debe de tener una película?
Muchas veces no entendemos, es más, ni siquiera nos hemos preguntado quién o cómo se determina la clasificación de una película. Te lo explicamos
Existe un sistema de clasificación por edades, que permite mediante indicativos en imagen —a veces acompañados con sonido— clasificar las películas con respecto a la idoneidad para el público en términos de temas, como sexo, violencia, abuso de sustancias, blasfemia, imprudencia u otros tipos de contenido para adultos.
Una calificación en particular emitida puede denominarse certificación, clasificación, certificado o calificación. Las clasificaciones generalmente tienen recomendaciones de edad con capacidad de asesoría o restricción, y con frecuencia se dan en lugar de la censura. En algunas jurisdicciones, la obligación legal de administrar la calificación puede imponerse en salas de cine.
La calificación de películas, según la edad del espectador, comenzó muy tarde en Estados Unidos, habiendo dependido inicialmente del código Hays para controlar el contenido de películas; la mayoría de los otros países empezaron a clasificar sus películas décadas anteriores, como el Reino Unido, con la calificación de la BBFC.
La calificación de la MPAA se instituyó el 1 de noviembre de 1968, en respuesta a las quejas por motivos religiosos sobre exposición de relaciones sexuales, violencia, contenido profano o insolente del cine americano. La revisión fue impulsado por las importaciones y el primer estudio de las emisiones que carecen de Estados Unidos.
Para clasificar una película se deben seguir varios parámetros
La MPAA aprobó y creó el «SMA» —sugerido para adultos— para la identificación de las películas violentas y las películas con temas maduros, junto al sello del código MPPA.
La erosión cultural de la producción de la película tiene varios efectos: por un lado, permitió la presentación de contenido violento como Psicosis de Alfred Hitchcock (1960), y por otro aumentó la explotación de bajo presupuesto, que era para las películas más violentas y sexualmente explícitas. Los productores de películas que no fueron miembros de la MPAA no se vieron afectados.
El sistema de clasificación fue legalmente inaplicable debido a la garantía de la libertad de expresión, inherente a la Primera Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, tal como lo ha interpretado en relación con lo sexual, violento, profano, insolente del contenido de los medios de comunicación que data Joseph Burstyn, Inc v. Wilson decisión.
Sin embargo, dos importantes casos del Tribunal Supremo de 1968, Ginsberg contra Nueva York y la Interstate Circuit, Inc. v. Dallas, dio lugar a la MPAA de la creación de su sistema de clasificación de películas.
¿Quién determina qué clasificación debe de tener una película?
En marzo de 2007, según Variety, el presidente de MPAA, Dan Glickman trató de crear una nueva clasificación llamada «Hard R» para las películas que contienen demasiada violencia, contenido sexual, lenguaje y desfachatez.
La calificación también propuso prohibir en virtud de la gente mayor de 18 años para ver las películas, como NC-17. El movimiento fue motivado aparentemente por los padres, que han estado presionando a Glickman y a la MPAA para crear una nueva calificación que resuelva el problema, ya que piensan que la calificación de R es demasiado «variable».
Otro problema es que si se clasificaba a las películas con Hard R en vez de NC-17, perderían gran cantidad de público adolescente.
También estudios de cine han presionado a la MPAA para que se abandone la calificación NC-17, porque puede hacer perder el valor de sus películas —por ejemplo, la mayoría de los comercios Blockbuster se niegan a realizar DVD nominales NC-17, y muchos diarios también rehúsan aceptar anuncios de películas NC-17.
Cinéfilo empedernido y amante de las películas, quien cree que estas deben de apreciarse en una sala cinematográfica (aunque también disfruta del bendito streaming). Director del sitio web estilo 8ymedio (plataforma dedicada al cine). Locutor de la estación de radio Irreversibleradio, donde en su programa Cine y Palomitas gusta de comentar su pasión cinéfila y hablar de estrenos y noticias al respecto. A muy temprana edad descubrió que el cine es un estilo de vida y una manera de crecer. Ha dado clases y trabajado en la Cineteca Nacional, en el Cinematógrafo del Chopo, en el INBA y en el Film Club Café. Cinéfago insaciable quien gusta de ver maratones de películas una y otra vez y sobre todo, comentarlas con quienes gustan de esta afición.
